Hay un dicho popular que afirma que somos lo que comemos. Sin entrar en cuestiones de tipo moral y filosófico sobre la alimentación, que darían mucho de qué hablar, en este artículo voy a indicar por qué es importante que nuestra dieta contenga diversos nutrientes en su justa medida.
Lo cierto es que hay casi tantas dietas como seres humanos, y eso se debe a que cada metabolismo trabaja de forma diferente. Hay personas que engordan fácilmente con un aporte de grasas que, en otros casos, no supone un problema, aunque se ingieran las mismas cantidades. Por lo tanto, será fundamental el autoconocimiento y ver qué es lo que nos sienta mejor o peor.
En todo caso, y salvo casos de intolerancias en los cuales hay que seguir las pautas del facultativo, lo ideal en una dieta es que se ingieran vitaminas, proteínas, minerales, hidratos de carbono y grasas, siempre en función de las necesidades de cada persona. Puede darse, además, que para determinadas dolencias o afecciones haya que priorizar el consumo de algunos alimentos, como por ejemplo las vitaminas para que el organismo realice la homeostasis sin problemas.
Por otra parte, hay casos puntuales en los que será necesario emplear un determinado tipo de dieta enfocada a no forzar los procesos de nuestro organismos. Las llamadas dietas blandas están indicadas para los procesos pre y postoperatorios, así como para convalecientes, y tienen como principal valor el hecho de ayudar al estómago en el proceso de digestión de los alimentos y evitar que realice grandes esfuerzos.
Más allá de todos estos casos, lo que sí es cierto es que una dieta no equilibrada suele tener un reflejo en el exterior, puesto que es común que muchas personas intenten compensar decepciones o situaciones frustrantes mediante el consumo compulsivo de algunos alimentos. El caso del chocolate quizás sea uno de los más recurrentes, incluso en el cine.
La pregunta es, ¿una buena dieta puede influir positivamente en mi proyección exterior? La respuesta es sí, y de varias formas. Está, por un lado, la típica dieta de adelgazamiento que hace que nos sintamos mejor con nuestro cuerpo, nos apetezca más salir y, consecuentemente, la gente de nuestro entorno va a percibirlo. Por otra parte, también existen determinadas dietas enfocadas a que tengamos más energía y vitalidad durante el día, y eso nos va a permitir estar más despiertos y activos en nuestras interacciones.
Por lo tanto, si hacemos una dieta que es beneficiosa para nuestro organismo, los resultados también van a influir fuera y es un punto que contribuirá a que seamos más felices.